La figura del Sumiller nos parece profundamente relevante. Poca gente hubiese imaginado hace años el interés que iba a despertar la cultura del vino y la gastronomía en nuestro país. Se come y se bebe distinto, con curiosidad, con conocimiento, con cultura… y en todo ello mucho tienen que ver los profesionales que están al frente del consumidor.
Probablemente es el profesional que mejor conoce los gustos del consumidor, las diferentes marcas, las tendencias en el mundo del vino, el precio que está dispuesto a pagar el cliente…
El sumiller también da forma y crea buenas maneras en la mesa, es un enlace entre el producto acabado y el consumidor final, entre el bodeguero y un público ávido de cultura de vino. El contacto del sumiller con el cliente se va afianzando cada vez más.
Es indudable que cada vez existe mayor cantidad y variedad de vinos en el mercado. Aumentan las referencias en las bodegas, se recuperan nuevas variedades de uva… Por eso es fundamental la figura del sumiller. El consumidor puede pedir asesoramiento a un profesional que está detrás de tanta botella, de precios tan diferentes, de variedades de uva distintas.
Los orígenes de la figura del Sumiller
Los orígenes de la figura del sumiller se podrían remontar a muchísimo tiempo atrás. Sabemos que ya en la época de los romanos había esclavos que desempeñaban esta función cuando sus amos celebraban. El praegustator era el catador mayor que probaba todos los platos, el nomenculator informaba a cada comensal sobre cada plato y el camera se encargaba de probar y servir los vinos. Bien sea como mero informador, responsable del servicio o incluso como conejillo de Indias para comprobar que una bebida no estaba envenenada, a lo largo de la historia la guarda y el servicio de vinos, licores y demás ha sido asignada a una persona que ha recibido nombres diferentes según la época.
Pero la idea que tenemos hoy por hoy del sumiller apareció a gestarse por el siglo XVII. Del camera romano se pasó a camarlengo o al hombre de cámara, después a chambelán y probablemente a camarero.
La palabra sumiller proviene de la francesa sommelier que significa lo mismo y además se acepta internacionalmente.
¿Cuáles son sus funciones?
Entre otras, estarían:
- Compra del vino
- Confeccionar la carta de vinos
- Gestionar el stock de la bodega
- Mantener en buen estado e idónea temperatura todas las bebidas
- Asesorar al cliente, recomendando el vino adecuado para la ocasión, para el plato que se va a servir…
Puede que también te interese: Los aromas de un vino
*Fuente: El Mundo del Vino Contado con Sencillez. Cristina Alcalá